José Luis Guirao es el Presidente de la Fundación Agua de Coco y Director de la ONG Bel Avenir. Bel Avenir es una ONG de Madagascar (la contraparte local de Agua de Coco). José Luis empezó su senda solidaria en 1992 de la mano de Vétérinaires sans frontières. En el año 1994 crea la Ptea Teuk Dong (Casa del Agua de Coco) en Camboya, dando un giro a sus actividades para centrarlas en proyectos de desarrollo humano en colectivos en riesgo de exclusión social.
José Luis es granadino, y el menor de 7 hermanos (mucha gente le conoce todavía como el chico) y vive en Madagascar desde 1996. Actualmente su familia está formada por su mujer Vola (se pronuncia Vula) y tres hijas Venny, Silvie y África. Comenta que cada vez se siente más a gusto en los países del Sur que en los tecnificados, pero deshumanizados en muchas ocasiones, países del Norte.
José Luis es el alma de la mayoría de los proyectos de la ONG, que diseña y lanza personalmente. Su carácter queda reflejado en lo innovador y diferente de muchos de ellos. Yo le conocí en un viaje de turismo en Madagascar donde nos cruzamos de forma casual. Conocerle personalmente y ver sus proyectos sobre el terreno son la razón de mi compromiso con la ONG desde hace ya seis años.
José Luis ha organizado junto a Vola las 4 corales que han venido a Europa desde 2008. Su trabajo en la gira es presentar los conciertos y hacerse cargo del grupo las 24 horas del día. La gira entraña unas dificultades que no nos resultan fáciles de entender, a no ser que se conozca el origen de las niñas. Ellas vienen en ocasiones de la extrema pobreza y les resulta nuevo utilizar un cuarto de baño, la electricidad, una cama con colchón y sábanas, y un largo etcétera que no resulta fácil imaginar.
También su trabajo consiste en labores de representación y contacto con los financiadores, así como diversas reuniones de la Fundación. Pero eso no impide que participe en todas las actividades y en muchas ocasiones parece 'un niño más'.
Una de las cosas que más me llaman la atención de José Luis es su capacidad de mantener esa ilusión y alegría en el trabajo que desempeña. Ya son muchos años trabajando en el terreno con los muchos sinsabores y los muchos problemas que surgen. Uno de los aspectos más complejos de su trabajo es dirigir a más de 170 trabajadores malgaches, que son muy difíciles de gestionar porque entienden el trabajo y la responsabilidad de una manera muy diferente a la nuestra. Sin embargo sigue tirando de todos los proyectos, e ideando cosas nuevas. José Luis, gracias por haber creado la Malagasy Gospel y gracias por todos los proyectos que llevas adelante.
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